Primero deciros que lo pasé muy bien en la entrega de camisetas/ruta/comida/copeo del domingo. Se ve que Peña ha reclutado entre sus amigos a muchos aficionados a la bici (y corredores) con lo que no será la última vez que vaya para allá.
Quedamos a las 9:30 en la Esquinita donde comprobamos que las tallas de las camisetas no se corresponden con lo que habíamos pedido, por supuesto los que estamos allí podemos elegir sin problema! Así que el que faltó que se j…jeje.
Parece que a la comida se apunta todo quisqui pero a la ruta fuimos 6: Peña, Edu, Luis, Goyo, Oscar y el que escribe. Hoy la logística funciona, está la furgo de Peña donde metemos las 6 bicis y nos acercamos a la presa de Buendía. De ahí salimos bordeando el Guadiela hasta llegar a la ermita de los Desamparados. Hace 2 años Peña celebró su cumple allí, justo el día después de la boda de mi hermano, con lo que pasé una buena resaca, eso sí, los filetes empanados de la madre de Peña están de cine. Entonces, se podía pasar el coche hasta casi la misma ermita, no como ahora. Encontramos una cancela a unos 4 km cerrada que hizo darse un buen paseo a mucha gente con la nevera al hombro, hay pobres…
Esta ruta que si, que bien, que si es chula, que si tal y cual, pero coño, que eran las 12, un poco pronto para ir de cañas, así que cogimos los coches de vuelta a Sacedón y unos cuantos subimos a la ermita del Socorro, y unas nenazas (no diré cuales) subieron con la furgo, para sólo hacerse la bajadita. Peña nos llevó por una senda de subida con mucha piedra, hasta coger la pista, y de ahí, unos subieron al alto, y unas nenazas (no diré cuales) fuimos directamente a la ermita.
Aquí hacemos un par de fotos, Edu pierde color y baja en furgo y nos juntamos todos en la Esquinita con el resto de la tropa. La comida cojonuda y a buen precio, luego una copa para desengrasar, bueno…en el Pino otra, y el resto ya no lo sé porque yo salí a las 7 para casa, aunque las malas lenguas dicen que a las 11 aún rondaban beerciclistas por Sacedón.
Hasta la próxima!!
